Tratamiento con cirugía.- La corrección quirúrgica de las hernias en la actualidad se fundamenta en varios hechos que la hacen más segura y confiable:


La cirugía ambulatoria.- Se define como aquella que se realiza sin hospitalización. Esto es posible cuando se usa anestesia local, puesto que el paciente está en condiciones de asumir sus funciones inmediatamente después de la cirugía. Se ha demostrado que la actividad física precoz favorece la recuperación después de la cirugía y protege de las complicaciones


La especialización en cirugía herniaria.- Como en toda la cirugía, la especialización ha llevado a un perfeccionamiento técnico del cirujano que ejecuta el procedimiento y  que da seguridad al paciente.


Desarrollo de técnicas seguras.- Actualmente se trata que el cirujano use las técnicas que probadamente dan mejores resultados. Esto se ha conseguido con estudios realizados tanto en Chile como en el extranjero sobre el resultado de las herniorrafias.


El uso de mallas.- Cuando los tejidos del paciente son de mala calidad, cosa que el cirujano aprecia durante la cirugía, las mallas consiguen reforzarlos adecuadamente y mejorar los resultados. Las técnicas con malla han pasada ser las más usadas por los cirujanos en la actualidad.


El desarrollo de técnicas laparoscópicas.- También se llaman mínimamente invasivas, puesto que el cirujano corrige el defecto introduciéndose por pequeñas incisiones de la piel a través de las cuales llega al defecto herniario y lo ocluye mediante un parche de malla. Si bien el paciente puede reintegrarse a sus actividades habituales más precozmente que con la cirugía abierta, el hecho que requiera hospitalización, anestesia general y su mayor  costo han conspirado para un mayor desarrollo de esta técnica en el mundo.


La duración de la estadía en el hospital depende en general del estado de salud de cada paciente, sin embargo, en promedio los pacientes permanecen un día hospitalizados y son dados de alta al día siguiente de la intervención.



Tratamiento sin cirugía.- Se basa en el hecho que las hernias son un saco de pared abdominal, que contiene vísceras (intestino, grasa) y que emergen a través de un punto débil de la pared, el anillo. Presionando el saco con las manos, éste se vacía porque las vísceras vuelven al abdomen. El tratamiento conservador consiste en colocar una almohadilla (braguero) ocluyendo el anillo. Esta almohadilla se mantiene en posición con un sistema de correas que se sujetan al muslo y a la cintura.
Si bien da buenos resultados en hernias inguinales pequeñas, dificulta la realización de actividades o esfuerzos mayores porque el braguero no logra mantenerse en posición.
Con los avances actuales de la cirugía no parece justificada la incomodidad del uso del braguero.